Hablemos de los últimos años teatrales en México
Artículo entregado a la Maestra Isabel Quintanar, para publicar en la Revista Teatro
* Lo leyó la Maestra en el siguiente Congreso del International Theater Institute, como escrito por ella
19 marzo 2010
Por BENJAMIN BERNAL
- Del aburrimiento al aturdimiento
Hacer un relato de los tres anteriores años, implica
hablar de periodismo, teatro, economía mundial y, claro, de artes escénicas,
que son el eje del presente artículo. Se dice que los periódicos están
muriendo, lo que niego, se están transformando lentamente, esperan a que les
llegue una verdadera crisis individual, entonces unos evolucionaran y otros
suspenderán sus publicaciones. ¿Qué les ha faltado? La velocidad para adaptarse
a los nuevos medios, entre ellos internet, que con los sitios informativos,
blogs y redes sociales (Social Media) transmiten rápidamente lo que sucede, en
textos breves, con imágenes y video, cierto es, con una parte de información chatarra,
aunque también en los medios escritos esto vino pasando por largos años. El
periodismo de cultura y espectáculos cada vez tiene menos reporteros, así que corta/pega
e incluye la información que recibe, se convierte así en simple vocero de los
productores e instituciones, no aplica su criterio o análisis a las notas. Dan
vida así a información sesgada, publicidad evidente, ideologías implícitas y
politización -quizá inconsciente- que se les filtra entre los dedos por las
prisas. En radio y televisión los espacios están llenos de declaraciones, más
que de interpretación de la realidad, así recibimos diariamente más de lo
mismo. Hay editores inteligentes que trabajan a fondo su información, claro, lo
sabemos.
Parte de las preguntas que haríamos al Artista,
Espectador o Crítico, es ¿qué función deben cumplir los mensajes de los
espectáculos? Con frecuencia nos proponen temas gastados, el triángulo amoroso,
las diferentes elecciones sexuales, Caín y Abel, el abuso de poder, todo lo
mencionado tiene influencia de la moral religiosa; traiciones, guerras y
alianzas, que involucran avanzada tecnología, donde los robots aprenden a ser
perversos como los humanos; deberemos incluir la magia, el esoterismo, como
elementos que vienen a participar del problema o a constituirse en la solución;
son temas que se repiten, alejando a un gran número de espectadores, que,
decepcionados, se acercan a otro tipo de medicina para su tedio.
Cada vez hay más opciones para el tiempo libre, bares
especializados, centros para apostar en cada colonia, enorme cantidad de
canales por cable, filmes 3D, lugares fantasiosos para bailar y beber, las
redes sociales, videos por internet, música, radio y tv en la web. Cada vez hay
más competidores que se quieren adueñar de los aficionados al teatro. A esto le llamo precisamente aturdimiento.
Hace muchos años que no aumenta el número de teatros
en México, CONACULTA (2004) hizo un censo en el que registra 544, de ellos, 129
estan en la ciudad capital. Guerrero y Nuevo León reportan 25. Tamaulipas 23.
Sonora 22. Guanajuato 21. Las entidades con menos foros son Nayarit, que detenta
sólo 2 y Tlaxcala 3.
En el caso del Distrito Federal la mayor concentración
esta en la Delegación Cuauhtémoc, 54 teatros. Coyoacán, 23. Miguel Hidalgo 15. El
municipio de Monterrey 14. Guadalajara, Colima y la Delegación Benito Juárez,
13.
El 53% de la población habita en municipios o
Delegaciones donde no hay un solo teatro. A eso se viene a sumar la denuncia
reiterada con frecuencia, de cada peso del presupuesto destinado a Cultura, 80
centavos son para mantener los aparatos administrativos y 20 para la producción
en sí.
Cada año, la Agrupación de Periodistas Teatrales hace su
propio recuento de los foros que están en servicio y nuestros números se
parecen a los que dio a conocer el Conaculta, ya que surgen nuevos y cierran
otros. Desaparecieron La Conchita, Stanistablas, Casa de Mora, Luces de Bohemia
a veces cierra largos meses; pero surgen otros, como El Círculo Teatral de
Alberto Estrella, la escuela de Sylvia Pasquel con un pequeño foro; el Teatro
Casa de la Paz a veces esta adormilado, hasta la llegada de Jaime Chabaud quien
lo ha revigorizado; la escuela de TV Azteca, Casa Azul, es otro foro de
reciente creación. El Foco resurge -antes Foro de la Comedia- El Teatro Arlequín
ha permanecido cerrado por años, ahora casi exclusivamente hace Teatro Gay; El Vicio,
de las Reinas Chulas, se dedica a Teatro Cabaret, con casi cien estrenos por
año; hay espacios pequeños como Contigo América que una vez desapareció; otro
nuevo es el Antonio González Caballero, en la colonia Granjas México. En
Guadalajara surgen La Casa Suspendida y Casa Inverso.
En los setentas las Casas de la Cultura daban todo
tipo de facilidades, surgieron Centros Culturales privados, con cine club y
espacio teatral, poco a poco murieron, lo peor es que las Casas de Cultura Gubernamentales
ahora cobran elevados precios a quien los renta.
Una queja de los foros independientes, es que las
autoridades aplican reglamentos restrictivos y normas que ahorcan, en vez de
apoyar; los subsidios y becas son complicados en su tramitación, además, con
frecuencia se les da a los personajes de siempre, así que desisten de
solicitarlos, decidiendo vivir exclusivamente de su creatividad y pequeñas
cuotas de los grupos que producen sin subsidios.
La Compañía Nacional de Teatro parecía desaparecida,
sin embargo en el 2008 y 2009 tienen una excelente época e inauguran un nuevo recinto
en Coyoacán. Ocasionalmente se unen a este circuito nuevos escenarios casi
profesionales como las Torres y el Santa Fe, dos cines que se adaptan para las
artes escénicas profesionales y hoteles como el Royal, NH y el de México, los
productores rentan salones para que se cumplan temporadas, a veces de larga
duración.
Dependen, por supuesto, de un eficiente aparato de promoción,
difusión y marketing.
Esto lleva a platicar acerca de la difusión que deben usar,
la principal empresa productora de espectáculos es OCESA ha llegado a tener 8 a
9 estrenos por año. En el 2006 dieron a conocer que habían llevado un millón de
espectadores a sus teatros, para 2007 apenas llegó a ochocientos mil con trece
montajes. Las instituciones como INBA, UNAM, Centro Helénico también vieron
disminuir la asistencia de espectadores. El año siguiente, el 2008, la crisis financiera
mundial asustó a todo mundo y provocó menos asistencia a los teatros y mayor
cuidado en el gasto familiar, donde la cultura no es prioridad. Estas empresas
poseen áreas de prensa especializada y amplios presupuestos para promoverse. En
tanto la difusión de las Instituciones públicas es criticada de lenta y tardía,
ya que los trámites y escaso presupuesto publicitario tienen poco impacto en el
que puede comprar una entrada.
Los foros y productores independientes necesitan
desplegar más ingenio que presupuesto para lograr informar de su trabajo. Los
espacios informativos dan prioridad a chismes y filtraciones de los famosos, en
vez de difundir las propuestas que plantean mensajes provocadores; frente a la
repetición de esquemas que décadas atrás eran transgresoras y hoy, ya no sacuden
al espectador.
Así llegamos a 2009, que tuvo un suceso nunca antes
visto, la llegada de la influenza (el H1N1) provocó que las autoridades cerraran
los teatros durante casi dos meses, con lo que muchas obras se retiraron de la
cartelera, y otras cuando regresaron a continuar la temporada ya habían perdido
el efecto de sus campañas publicitarias, provocando grandes pérdidas. Desde las
guerras internas de México en los siglos XIX y XX, no se habían cerrado los
teatros, fueron casi cien años de actividad ininterrumpida. La población
mexicana se pregunta si esas medidas fueron adecuadas o exageradas, pero de que
afectaron a los productores de teatro, instituciones y artistas, ni duda cabe.
La crisis también forzó a los productores a imaginar
nuevas soluciones, algunas de ellas, las habíamos sugerido en las ceremonias
para entregar los premios APT, como bajar precios, subastar dos filas minutos
antes de dar tercera llamada, fila para estudiantes a cien pesos. Así que los
montajes profesionales durante 2008 crearon las siguientes ofertas: OCESA en
sus montajes comerciales de alta calidad (Mamma Mia, ) hacía promociones, al
comprar 3 recibía 5 entradas (600 pesos era el precio de un solo boleto, o sea,
casi cincuenta por ciento de descuento) Silvia Pinal en Adorables enemigas a sólo
150.00 (300 pesos el acceso normal) Por su parte UNAM e INBA los jueves abrieron
taquilla a 30.00 Hay que hacer notar que fueron obras importantes, con elencos
de talla internacional como Ana de la Reguera y Hernán Mendoza.
El mejor Festival que abre cada año, se llama Amantes
del Teatro (Centro Mexicano de Teatro ITI UNESCO) durante 2008 mostró 42
trabajos en catorce días, con acceso gratuito, rebasa los 20,000 espectadores.
Esto es gracias al esfuerzo de la organizadora Maestra Isabel Quintanar y
escasos patrocinios. Es uno de los grandes esfuerzos para crear nuevo público e
interesar a quienes ya habían optado por otras diversiones.
Acerca del presupuesto anual asignado a cultura, se ha
defendido con argumentos sólidos, pero no hacen caso: Cada región, estado y
segmento poblacional, ha dado una aportación histórica a la cultura y a la
economía, esa misma porción, se le debería devolver como presupuesto, o sea,
sin diferencias, pues a lo urbano se da la mayor parte y para ciertos estados,
ciudades y poblaciones rurales, las cifras son mínimas. Hay 12% de población
indígena en México y se le asigna apenas del 1 al 3% de presupuesto y nadie
explica por qué. No se traduce a los 360 idiomas locales.
Eso hace prevalecer el concepto de alta cultura, lo “fino”,
lo que simplemente llaman tradiciones, otras
definitivamente marginales, en concepto de funcionarios sin estudios profundos
o insensibles. Somos un país diverso, pero, lo quieren convertir en
fragmentado. Quizá haya temor a que al mostrar las culturas originales, de
alguna forma marginales, se introduzcan conceptos que amenacen la autoridad
vertical, sin entender un supuesto universal: la diversidad es parte de la
unidad y apreciarla es pasar del “ellos” al “nosotros”
Ahora que tratan de celebrar el bicentenario de la
Independencia y centenario de la Revolución en México, resulta fundamental enfatizar
que la cultura original es universal y no debemos dejar que se llene de
singularismos o ideologías ocultas. Hasta ahora el objetivo ha sido crear grupos
de consumidores homogeneizados, pero la cultura siempre ha imitado a la
Biología, que es múltiple y única en su íntima alma.
Los odios étnicos, contra grupos minoritarios y/o
marginales que se esparcen en el mundo, son por ceguera ante la realidad
antropológica. Vivimos, además, en la era de las encuestas que ya no dicen
nada, como las consultas que se elaboran para obras o planes invasivos de las
regiones y culturas.
Las convocatorias más importantes de México son El
Festival Internacional Cervantino y el de la Ciudad de México, que nos brindan
la oportunidad de ver los mejores montajes del mundo y de nuestro país. Ver lo
que se hace en el mundo es prioritario.
Unas breves líneas acerca de los estrenos que hemos tenido:
Equinoccio (Luisa Josefina Hernández) nostalgias de la vida en la colonia Roma
cincuentera; Verónica en portada (Estela Leñero) narra los amores de la
juventud dedicada al teatro; Siberia (David Olguin) un juego onírico sobre la
angustia; Play Medea (David Hevia) análisis del poder que extiende los límites
de lo moral. Diversión pura: Los 39 Escalones, La pareja dispareja, Chiquita
pero picosa, P.D. Tu gato ha muerto, Adorables enemigas, Lisístrata, que tiene
un mensaje neo feminista; La señora de su casa, Dario fo. Destacan en la parte
más comercial de la cartelera con Avenida Q, Una Eva y dos patanes, Dulce
Caridad, Tick tick boom.
El reciente 2009 llenaron la cartelera: El otro
Einstein (Andrés Roemer) que nos acerca a la debilidad humana del Científico;
Cena de Reyes (Nicolás Alvarado) un juguete sobre cuentos de Alfonso Reyes;
Delirium Tremens (Antonio Crestani e Ignacio Solares) sobre las visiones
místico-religiosas del alcohólico en su rehabilitación. Yo soy mi propia
esposa, monólogo interesante sobre un travesti que sobrevive a la Alemania Nazi
y el Comunismo; Lobos, obra argentina sobre la ingeniosa forma que tienen los
políticos para robar; Todos eran mis hijos, un remontaje a la obra de Miller;
Claudia me quieren volver loca, otro intento por revivir un éxito setentero;
Otelo, una vez más con un buen elenco que encabeza Ana de la Reguera; Las
cuatro estaciones, obra sobre el divorcio, el abandono, que ya poco inquieta;
El Diario de Ana Frank, un mensaje muy lejano para el público mexicano del
siglo XXI. En cuanto a lo musical: La novicia rebelde, que goza de poderoso
recuerdo en los espectadores de todas las edades, Mamma Mia¡ interesante
revival de Abba, Qué plantón, el musical mexicano ecologista de los ochentas;
Mentiras, un ensamblaje de melodías famosas ochenteras.
Al iniciar 2010 la cartelera afronta temas con algunos
temas novedosos en obras formales: La gorda, reflexiona sobre la sicología de
los obesos y la discriminación absurda que les azota; Mario, obra de cuatro
jóvenes que viven problemas propios del siglo XXI, sus amores y engaños, varios
abortos, unas son lesbianas, otras son curiosas, hasta mencionan parejas
estables. Por el lado de los musicales presentan Hair spray, famoso filme con
John Travolta, habla de la gente rolliza y la exclusión que sufren.
Como se ve, las formas cambian poco, hay cada vez más
tecnología y algunos autores, directores y productores sensibles se atreven a
temas de mayor impacto social. Se sigue practicando el “allá y entonces” por
miedo a que el “aquí y ahora” no interese al mexicano, invadido de entretenimientos
de origen extranjero, principalmente norteamericano.
Si, se ha transformado el teatro Mexicano, y, para disfrutarlo,
les invitamos a venir.
- Presidente de la Agrupación de Periodistas Teatrales